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Los derechos de los migrantes son derechos humanos!

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Ámsterdam, 18 de diciembre de 2015

 

En la segunda mitad de 2015 ha tenido lugar un movimiento de personas a través de las fronteras, particularmente dentro de Europa, sin precedentes. Los gobiernos europeos así como el Consejo de la Unión Europea (UE) han fracasado en la gestión de esta crisis humanitaria, y la política de migración orientada hacia la seguridad ha causado la muerte de miles de hombres, mujeres, niñas y niños. De acuerdo con la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), más de 3.455 personas han fallecido en el mar intentando alcanzar la UE hasta el 10 de noviembre de 105, y Human Rights Watch estima que 800.000 personas han llegado a Europa este año.

 

 

Hoy, 18 de diciembre de 2015 – fecha adoptada por la Asamblea General de las Naciones Unidas en 1990 como Día de la Convención Internacional para la Protección de los derechos de lo/as trabajadore/as migrantes y los miembros de sus familias – para recordar a las miles de personas que han muerto en el traicionero viaje hacia las fronteras europeas, y expresamos nuestra solidaridad con las que han sobrevivido. También son momentos en los cuales debemos recordar a todas las personas que perdieron la vida al intentar cruzar la frontera entre los Estados Unidos y México, y en los mares de Asia, así como aquellas que han muerto a causa de las intolerables condiciones de trabajo en Qatar.

 

A la vez, protestamos por las políticas económicas y guerreras de la UE y de otros gobiernos, así como del sector de las transnacionales, que están intensificando y se encuentran a la raíz de lascausas de la migración y de la huida de las personas refugiadas, contribuyendo también al desastre del cambio climático – obligando a la gente a abandonar sus hogares y fuentes de vida.

 

Parece que la principal respuesta de los líderes políticos europeos y de sus “más cercanos” vecinos y cómplices, radica en abandonar el marco de los derechos humanos y substituirlo por la militarización y la externalización de las fronteras, así como la criminalización de las personas forzadas a desplazarse. Esta tendencia ya fue subrayada en 2010 en la Declaración Conjunta del Grupo de las Naciones Unidas sobre Migración.

 

“Con demasiada frecuencia los Estados han abordado la migración únicamente a través del enfoque de la soberanía, la seguridad fronteriza o aplicación de la ley, a veces impulsados por grupos nacionales hostiles. Aunque los Estados tienen intereses legítimos en lo que atañe a la seguridad de sus fronteras y el ejercicio de los controles de inmigración, tales preocupaciones no pueden, al tratarse de una cuestión de derecho internacional, anteceder a las obligaciones del Estado de respetar los derechos de las personas garantizados internacionalmente, de proteger esos derechos contra los abusos, y cumplir con los derechos necesarios para que puedan disfrutar de una vida de dignidad y seguridad”.

 

La coyuntura actual también plantea el reto de un nuevo debate y la necesidad de repensar en la falsa dicotomía entre los migrantes y los refugiados. A pesar de las principales razones contextuales particulares por inmigrantes o solicitantes de asilo abandonan sus países de origen, la protección de los Derechos Humanos para todos sigue siendo central. Según Francois Crépeau, el Relator Especial de la ONU sobre los Migrantes,

 

“Un enfoque continuo en la seguridad sigue estructurando la forma en que la Unión Europea se encarga de la gestión de fronteras. Una integración mayor y coherente de los derechos humanos de los migrantes en las políticas no se encuentra. El sistema sigue caracterizándose por la complejidad, la falta de armonización entre las políticas pertinentes y las normas regionales e internacionales de derechos humanos, la limitada responsabilidad compartida y la ausencia de la voluntad política necesaria para iniciar los cambios necesarios”

 

Durante estos meses de respuesta ineficaz a la crisis en las fronteras de Europa, también hemos sido testigos de la subida y la visibilidad de las voces derechistas y racistas, que incluso han llegado a ser representadas en algunos parlamentos nacionales y regionales. Ya es hora de reiterar que el racismo, la xenofobia, la islamofobia, el antisemitismo y todas las formas de discriminación y violencia de género no tienen cabida en nuestras sociedades – ni en Europa y ni en nuestros países de origen.

 

Por ello, hoy, 18 de diciembre de 2015, nosotro/as, como Plataforma Transnacional de Migrantes, reivindicamos:

 

  • Una revisión de las políticas sobre migración y acogida de personas refugiadas, para que no consistan en respuestas cortoplacistas ante la crisis, sino que se basen en estrategias de largo aliento, dentro del marco de los Derechos Humanos fundamentales.
  • Una revisión fundamental de los desastrosos Acuerdos y Tratados de Libre Comercio e Inversiones que empobrecen a nuestros Pueblos.
  • Poner de forma inmediata fin a las actuales guerras – incluyendo a las campañas de bombardeo del Medio Oriente y de Kurdistán.

 

En particular, exigimos a nuestros gobiernos:

 

  • La ratificación de la Convención de las Naciones Unidas de 1990 sobre los Derechos de las personas migrantes
  • El pleno respeto de los derechos humanos y de la legislación internacional
  • Actuar de forma urgente para socorrer a las personas migrantes que está en el mar y proveerles una entrada segura y legal a Europa para refugiadas y migrantes.
  • Actuar en contra del racismo, la islamofobia y todas las otras formas de xenofobia.

 

Finalmente, sumamos nuestros esfuerzos como personas migrantes y refugiadas con los movimientos sociales, los sindicatos, las y los pequeños agricultores, los Pueblos Indígenas, las mujeres, redes de defensa del medio ambiente y todas las personas que resisten ante el actual modelo económico y político, incluyendo el desastre del Cambio Climático. De forma conjunta, podemos crear una real diferencia, en la creación de una sociedad en Europa que tenga por objetivo el fin de la austeridad, de la desigualdad, el racismo y todas las formas de discriminación.

 

Co-Convocantes:

 

Commission For Filipino Migrant Workers (CFMW), Platform of Filipino Migrant Organisations in Europe, Foundation University, Turkish Workers Foundation (HTIB), Euro-Mediterraan Centrum Migratie & Ontwikkeling (EMCEMO), Kromantse Foundation (Ghana), Social Development Cooperative (Ghana), Africa Roots Movement, RESPECT Network, Trusted Migrants, Koop Natin, Indonesian Migrant Workers Union (IMWU), OTRADELA, Transnational Institute (TNI).