Declaraciones, Noticias

Carta de respaldo de Adolfo Pérez Esquivel a la Unión de Afectados por Texaco

Unión de Afectados y Afectadas por las Operaciones Petroleras de Texaco (UDAPT).

 

 

Buenos Aires, 1º de agosto de 2018.-

A quien corresponda:

 

 

Luchar  por  la  justicia  representa  un  enorme  esfuerzo  para  los pueblos,  especialmente  los  indígenas,  pobres  y  de  países subdesarrollados, sometidos a las grandes presiones que sobre ellos ejercen las transnacionales, los Estados y los poderes políticos y económicos.

 

Pero hay ejemplos invaluables, que a su paso abren caminos y allanan los obstáculos generados por las estructuras mundiales para garantizar la impunidad de las empresas multinacionales cuando violan los derechos humanos de los pueblos.

 

Este es el caso de la Unión de Afectados/as por Texaco, organización que aglutina a más de 30 mil indígenas y campesinos de la Amazonía norte de Ecuador, que por más de 25 años han llevado adelante la batalla legal más trascendente    que    una    comunidad    haya    enfrentado    en    contra    de    una transnacional, Chevron, una de las cuatro petroleras más poderosas del mundo.

 

En esta batalla han logrado que se reconozca la culpabilidad de Chevron en la contaminación de más de 480 mil hectáreas de selva amazónica, pero también la responsabilidad sobre los graves impactos socio-económicos, culturales, ecológicos y de salud que enfrentan las poblaciones que se asientan en la zona que fue explotada por la corporación.

 

Todas las instancias judiciales que han estudiado el fondo del caso han dado la razón a los afectados, que con sus pocos recursos, pero con una fortaleza digna de reconocimiento, ha logrado sostener por un cuarto de siglo esta búsqueda de justicia en varios países del mundo. Durante este tiempo han logrado sistematizar, como ninguna otra experiencia en el mundo, la estructura que permite que las transnacionales puedan violar los derechos  humanos. Estos aprendizajes, son ahora los que estamos usando para luchar por mecanismos internacionales que impidan que sigan vigentes estas estructuras.

 

Pero ahora, enfrentan un grave problema. Una Corte de Apelaciones de Canadá, ha dictaminado que los afectados deben pagar más de 350 mil dólares canadienses, por concepto de costas judiciales, lo que frenaría la posibilidad de seguir litigando en esa jurisdicción y por tanto se perderían los grandes avances logrados por los afectados para cobrar la sentencia a emplearse en la reparación de las zonas afectadas.

 

Por esta razón, me dirijo a ustedes para pedirles su apoyo para estos luchadores,  que  en  su  proceso  están desenmarañando  todo  el  tejido  de impunidad para lograr que las otras batalladas de los otros pueblos puedan acceder a justicia. Ayúdanos a parar la impunidad corporativa.

 

Reciban un saludo de Paz y Bien.

 

Adolfo Pérez Esquivel Presidente del SERPAJ Premio Nobel de la Paz